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Sobre el Ministerio Fiscal y la instrucción en el proceso penal
Hace más de treinta años me ocupé públicamente por vez primera del asunto que llamaré, para simplificar, “la instrucción a los Fiscales”, aunque se trata del control de la investigación de conductas de apariencia punible, investigación que, siempre y en todas partes, es tarea de la policía. Al cabo de cierto tiempo de muchas palabras y poco trabajo serio, en 2010, me acometió un gran cansancio –¬hastío, más bien– ante la prolongada, evanescente y estéril discusión sobre la reforma de marras. Entonces, en 2010, formulé y anuncié con publicidad mi propósito de no participar en debates o discusiones sobre “la instrucción a los Fiscales”. Que en el Pleno de Numerarios de esta Real Academia haya sido abordado reiteradamente ese asunto me obliga a claudicar por una vez de ese propósito. Porque mi silencio aquí pudiera interpretarse como desinterés por el tema e incluso como una cierta desconsideración hacia Vds. y nada de eso sería más contrario a la realidad. […]
Punto primero.– [Los debates sobre lo imposible]
Punto segundo.– [Sobre el Ministerio Fiscal, lo que urge es establecer seriamente su responsabilidad]
Punto tercero.– [Cambiar una “pieza” clave sin un modelo nuevo de proceso penal]
Punto cuarto.– [La propuesta real sobre “la instrucción a los Fiscales” persigue el control del proceso penal por el poder político]
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Hace más de treinta años me ocupé públicamente por vez primera del asunto que llamaré, para simplificar, “la instrucción a los Fiscales”, aunque se trata del control de la investigación de conductas de apariencia punible, investigación que, siempre y en todas partes, es tarea de la policía. Al cabo de cierto tiempo de muchas palabras y poco trabajo serio, en 2010, me acometió un gran cansancio –¬hastío, más bien– ante la prolongada, evanescente y estéril discusión sobre la reforma de marras. Entonces, en 2010, formulé y anuncié con publicidad mi propósito de no participar en debates o discusiones sobre “la instrucción a los Fiscales”. Que en el Pleno de Numerarios de esta Real Academia haya sido abordado reiteradamente ese asunto me obliga a claudicar por una vez de ese propósito. Porque mi silencio aquí pudiera interpretarse como desinterés por el tema e incluso como una cierta desconsideración hacia Vds. y nada de eso sería más contrario a la realidad. […]
Punto primero.– [Los debates sobre lo imposible]
Punto segundo.– [Sobre el Ministerio Fiscal, lo que urge es establecer seriamente su responsabilidad]
Punto tercero.– [Cambiar una “pieza” clave sin un modelo nuevo de proceso penal]
Punto cuarto.– [La propuesta real sobre “la instrucción a los Fiscales” persigue el control del proceso penal por el poder político]
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