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Hofmann versus Bluhme
En 1820 Bluhme publica un importante trabajo titulado Die Ordnung der Fragmmente in den Pandectentiteln en el que expone su conocida teoría de las masas. Seguía una tradición importante ya enunciada por Antonio Agustín en el siglo XVI, que mantenía que los fragmentos de Digesto se sucedían según un orden constante. Y si bien es cierto que no reveló el método seguido, en su tesis éste se vislumbra en los propios razonamientos expuestos a propósito de D. 50,16 y 50,17. Así, se puede mantener que Bluhme, tras observar las inscripciones de los textos, principalmente las de estos títulos, evidencia que tres grupos de textos o masas se van alternando -sabiniana, edictal y papiniana-, sucediéndose con un cierto criterio constante que responde al mismo orden en el que los compiladores leyeron las obras de las que extractaron los fragmentos. La diferencia que advierte el autor alemán es que en D. 50,16 los libros primeros de los comentarios ad edictum figuran al comienzo del título, mientras que en D. 50,17 se recogen en primer lugar los escritos sabinianos y las quaestiones de Papiniano. Posteriormente procede al cotejo de ambos títulos con 45,1 y comprueba que los libros ad edictum están ubicados entre los sabinianos y los papinianos [...]
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En 1820 Bluhme publica un importante trabajo titulado Die Ordnung der Fragmmente in den Pandectentiteln en el que expone su conocida teoría de las masas. Seguía una tradición importante ya enunciada por Antonio Agustín en el siglo XVI, que mantenía que los fragmentos de Digesto se sucedían según un orden constante. Y si bien es cierto que no reveló el método seguido, en su tesis éste se vislumbra en los propios razonamientos expuestos a propósito de D. 50,16 y 50,17. Así, se puede mantener que Bluhme, tras observar las inscripciones de los textos, principalmente las de estos títulos, evidencia que tres grupos de textos o masas se van alternando -sabiniana, edictal y papiniana-, sucediéndose con un cierto criterio constante que responde al mismo orden en el que los compiladores leyeron las obras de las que extractaron los fragmentos. La diferencia que advierte el autor alemán es que en D. 50,16 los libros primeros de los comentarios ad edictum figuran al comienzo del título, mientras que en D. 50,17 se recogen en primer lugar los escritos sabinianos y las quaestiones de Papiniano. Posteriormente procede al cotejo de ambos títulos con 45,1 y comprueba que los libros ad edictum están ubicados entre los sabinianos y los papinianos [...]