Diccionario panhispánico del español jurídico

10 de 10 copias disponibles

Administración mancomunada y revocación de poderes. Acerca de la resolución de la DGRN de 15 de abril de 2015

por González-Meneses García-Valdecasas, Manuel

Artículo
ISSN: 1885-009X
Ver otros artículos del mismo número: 61

Una reciente resolución de la DGRN de 15 de abril de 2015 ha vuelto a poner de actualidad el tema de la revocación de poderes en aquellas sociedades que tienen un órgano de administración mancomunado. ¿La revocación de un poder requiere una actuación conjunta de los administradores mancomunados o se puede realizar de forma unilateral por uno solo de ellos? El asunto no es nuevo, porque ya fue tratado por una resolución de 12 septiembre de 1994 y por otra de 30 de diciembre de 1996. En la primera de estas resoluciones se revisó una calificación registral según la cual no era inscribible un poder general con facultades de actuación individual muy amplias otorgado por dos administradores mancomunados a favor de cada uno de ellos. El Registrador mercantil había rechazado la inscripción del poder por entender que el otorgamiento de un poder de este tipo suponía convertir en solidaria una administración querida como mancomunada por los socios. Como argumento favorable a la inscripción del poder, la DG dio a entender que ese poder era revocable de forma individual por cualquiera de los administradores, porque a partir de esa revocación unilateral el apoderado no reuniría ya la voluntad concorde de ambos administradores, ni por tanto la del órgano. Una posterior resolución de 15 de marzo de 2011 consideró posible la revocación por uno de los administradores mancomunados de un poder que había sido conferido por ambos administradores a la persona física representante del otro administrador mancomunado en el ejercicio de dicho cargo. Esta resolución daba a entender que esa revocación unilateral era posible precisamente en la medida en que existía una coincidencia entre la persona del apoderado y uno de los administradores mancomunados (o su persona física representante en el cargo), porque, de lo contrario, el propio apoderado podría impedir la revocación del poder. Con este antecedente y con una argumentación muy escasa, la resolución de 15 de abril de 2015 no admite la revocación unilateral por uno solo de los administradores mancomunados de un poder que había sido conferido a un tercero (es decir, en un caso en que el apoderado no es uno de los administradores).

Arecent resolution of the Spanish Directorate General for Registers and Notaries (DGRN) of April 15th, 2015, has once again spotlighted the revocation of powers in companies with joint directors. ¿Does the revocation of a power of attorney require the coordinated action of all joint directors or can it be achieved by unilateral action of one of the directors? This is not a new issue: it was addressed by a resolution on September 12th, 1994, and by another one on December 30th , 1996. The first of these resolutions revised a registrar’s assessment according to which, a general power of attorney with broad powers to act individually, granted by two joint directors in favour of each other, could not be registered. The business registrar had refused to make the entry arguing that granting such a power meant turning a joint administration, just as the partners intended, into a several one. The argument put forward by the DGRN in support of the registration was that any of the directors had the authority to revoke the power individually. After such unilateral revocation, the proxy would no longer have the support of both directors and thus neither that of the body. A subsequent resolution of March the 15th, 2011, also thought possible the revocation by one of the directors of a power granted by both of them to the individual representing the other joint director in office. This resolution implied that such unilateral revocation was possible precisely because the proxy and one of the joint directors (or his/her individual representative in office) were one and the same person; otherwise, the proxy himself could object to the revocation. On that basis and with very limited arguments, the resolution of April 15th, 2015, does not sustain the unilateral revocation by one of the joint directors of a power granted to a third party (that is, when representative and director are not one and the same person).


  • Formato: PDF
  • Número de páginas: 8
  • Tamaño: 366 Kb.

Agregar valoración

Para este apartado es necesario identificarse mediante la opción "Acceso" en el menú superior

Una reciente resolución de la DGRN de 15 de abril de 2015 ha vuelto a poner de actualidad el tema de la revocación de poderes en aquellas sociedades que tienen un órgano de administración mancomunado. ¿La revocación de un poder requiere una actuación conjunta de los administradores mancomunados o se puede realizar de forma unilateral por uno solo de ellos? El asunto no es nuevo, porque ya fue tratado por una resolución de 12 septiembre de 1994 y por otra de 30 de diciembre de 1996. En la primera de estas resoluciones se revisó una calificación registral según la cual no era inscribible un poder general con facultades de actuación individual muy amplias otorgado por dos administradores mancomunados a favor de cada uno de ellos. El Registrador mercantil había rechazado la inscripción del poder por entender que el otorgamiento de un poder de este tipo suponía convertir en solidaria una administración querida como mancomunada por los socios. Como argumento favorable a la inscripción del poder, la DG dio a entender que ese poder era revocable de forma individual por cualquiera de los administradores, porque a partir de esa revocación unilateral el apoderado no reuniría ya la voluntad concorde de ambos administradores, ni por tanto la del órgano. Una posterior resolución de 15 de marzo de 2011 consideró posible la revocación por uno de los administradores mancomunados de un poder que había sido conferido por ambos administradores a la persona física representante del otro administrador mancomunado en el ejercicio de dicho cargo. Esta resolución daba a entender que esa revocación unilateral era posible precisamente en la medida en que existía una coincidencia entre la persona del apoderado y uno de los administradores mancomunados (o su persona física representante en el cargo), porque, de lo contrario, el propio apoderado podría impedir la revocación del poder. Con este antecedente y con una argumentación muy escasa, la resolución de 15 de abril de 2015 no admite la revocación unilateral por uno solo de los administradores mancomunados de un poder que había sido conferido a un tercero (es decir, en un caso en que el apoderado no es uno de los administradores).

Arecent resolution of the Spanish Directorate General for Registers and Notaries (DGRN) of April 15th, 2015, has once again spotlighted the revocation of powers in companies with joint directors. ¿Does the revocation of a power of attorney require the coordinated action of all joint directors or can it be achieved by unilateral action of one of the directors? This is not a new issue: it was addressed by a resolution on September 12th, 1994, and by another one on December 30th , 1996. The first of these resolutions revised a registrar’s assessment according to which, a general power of attorney with broad powers to act individually, granted by two joint directors in favour of each other, could not be registered. The business registrar had refused to make the entry arguing that granting such a power meant turning a joint administration, just as the partners intended, into a several one. The argument put forward by the DGRN in support of the registration was that any of the directors had the authority to revoke the power individually. After such unilateral revocation, the proxy would no longer have the support of both directors and thus neither that of the body. A subsequent resolution of March the 15th, 2011, also thought possible the revocation by one of the directors of a power granted by both of them to the individual representing the other joint director in office. This resolution implied that such unilateral revocation was possible precisely because the proxy and one of the joint directors (or his/her individual representative in office) were one and the same person; otherwise, the proxy himself could object to the revocation. On that basis and with very limited arguments, the resolution of April 15th, 2015, does not sustain the unilateral revocation by one of the joint directors of a power granted to a third party (that is, when representative and director are not one and the same person).


  • Formato: PDF
  • Número de páginas: 8
  • Tamaño: 366 Kb.
  • Lectura offline protegida
  • Lectura online

Agregar valoración

Para este apartado es necesario identificarse mediante la opción "Acceso" en el menú superior